DR. JUAN JORGE MENDOZA RUIZ
Seguro que has oído hablar del ultrasonido, esa técnica médica que nos permite echar un vistazo al interior de nuestro cuerpo. Pero, ¿has oído hablar específicamente del ultrasonido de tiroides? Si te pica la curiosidad, ¡sigue leyendo! Hoy vamos a explorar a fondo este tema.
Primero lo primero: ¿Qué es un ultrasonido?
Antes de sumergirnos en los detalles del ultrasonido de tiroides, echemos un vistazo rápido al ultrasonido en sí. Es una técnica que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para obtener imágenes del interior del cuerpo. Imagina que es como el eco que oyes cuando gritas en una montaña, pero mucho más sofisticado (tecnológicamente hablando).
La tiroides: esa glándula en forma de mariposa
Ubicada en nuestro cuello, la tiroides tiene un papel fundamental en el metabolismo, la producción de proteínas y otras funciones esenciales (lo cual se describe más ampliamente en el artículo titulado ”¿Qué es la tiroides y porqué es importante? (resaltar en negritas y agregar el link). Sin embargo, como cualquier parte de nuestro cuerpo, puede presentar problemas.
¿Por qué hacerle un ultrasonido a la tiroides?
Aunque no mide directamente la función tiroidea, el ultrasonido nos permite obtener información acerca de la estructura de la glándula. El ultrasonido puede detectar la presencia de nódulos, permitiendo una evaluación detallade de sus características, y ante la sospecha de malignidad el ultrasonido es de vital importancia como guía en realización de biopsias.
¿En qué consiste la realización del ultrasonido de tiroides?
Preparación
A diferencia de otros exámenes médicos, el ultrasonido de tiroides no requiere una preparación específica previa. ¡Solo necesitas presentarte en el consultorio y listo!
¿Qué esperar durante el procedimiento?
Acostado en una camilla, se te aplicará un gel en el cuello para mejorar la transmisión de las ondas sonoras. Luego, el médico desplazará un transductor (un pequeño dispositivo) sobre tu cuello, y en una pantalla de alta resolución se irán mostrando (en tiempo real) las imágenes de tu tiroides. El médico que realiza el estudio estará capturando las imágenes más representativas de la glándula tiroidea, buscando en todo momento identificar alteraciones estructurales.
Las imágenes obtenidas se guardan de manera digital en la nube de un proveedor especialista para tal fin. Con ello los pacientes tienen el acceso remoto desde cualquier parte del mundo a su estudio.
¿Duele?
¡Para nada! Es un procedimiento no invasivo y completamente indoloro.
Interpretando los resultados
Una vez finalizado el ultrasonido, un MÉDICO radiólogo DEBE analizar las imágenes y realiza un reporte del estudio. Dicho reporte queda disponible de manera digital para el paciente. De esta manera, podrás conocer si tienes nódulos, quistes o cualquier otra anomalía en tu tiroides.
¿Y si encuentran algo?
No hay que alarmarse de inmediato. Muchos nódulos tiroideos son benignos y no requieren tratamiento. Sin embargo, tu médico podría recomendarte estudios adicionales para estar seguros.
Conclusión
El ultrasonido tiroideo es un procedimiento sencillo, indoloro y no invasivo que nos ofrece una ventana al estado de nuestra glándula tiroides. Gracias a la tecnología y a las ondas sonoras, podemos garantizar un diagnóstico temprano y preciso para cuidar nuestra salud.. Es sencillo, rápido y no invasivo. Así que, si alguna vez te lo recomiendan, ¡ya sabes qué esperar!¡Hasta la próxima!
Y recuerda, cuidar de tu tiroides es cuidar de ti.